La lujuriosa Lily Jordan se atrevió a tener sexo conmigo contra su voluntad. Nos atraparon, pero solo avivó nuestro deseo. Nos entregamos a actos kinky, dándonos placer a los cuerpos mutuamente, sin dejar ningún tabú inexplorado. Nuestra pasión no conocía límites.
Siempre he sido un tipo cachondo, y cuando descubrí que mi hermana Lily Jordan estaba sola en casa, decidí aprovechar la situación.Fui a su lugar, y apenas abrió la puerta, empezamos a besarnos apasionadamente.Ella parecía estar bien con eso al principio, pero luego su hermano entraba sobre nosotros, pillándonos en el acto.En vez de enfadarnos, me desafió a seguir, diciendo que su hermana era una chica morbosa que le encantaba ser observada.Yo estaba más que dispuesto a complacer.Lily y yo procedimos a tener una sesión salvaje, con ella mostrando su cuerpo y habilidades increíbles.Nos pusimos al día en el calor del momento, y antes de que lo supiéramos, tuvimos sexo en cada habitación de la casa.Al final, ambos estábamos completamente satisfechos y prometimos mantener nuestro encuentro en secreto.