Después de una sesión de entrenamiento agotador de femdom, me uní a mi instructor y a un compañero para ducharse. Sus cuerpos desnudos encendieron un deseo que no pude resistir. El encuentro caliente empujó mi sumisión a nuevos límites.
Después de una intensa sesión de entrenamiento femdom, me encontré uniendo a un grupo de chicas guapísimas mientras se duchaban.Mi hermoso instructor me había invitado a unirme a ella para un poco de práctica extra, pero poco sabía, esto llevaría a esto.La vista de sus cuerpos brillantes, sus curvas y piel suave, era simplemente irresistible.Cuando el agua cascada sobre nosotros, los límites se difuminaron y el deseo se apoderó.Las manos firmes pero suaves de los instructores guiaron mi polla endurecida hacia ella, mientras las otras chicas miraban con anticipación.La habitación estaba llena de gemidos y risas, mientras exploramos nuestros nuevos deseos bajo el agua caliente.La experiencia fue abrumadora, una combinación perfecta de poder y placer.Pero a medida que el agua eventualmente se detenía, la realidad se incorporó y nos separamos, dejando los encuentros calientes detrás.